5 Y cuando la encuentra la pone contento sobre sus hombros,
6 y al llegar a casa junta a sus amigos y vecinos y les dice: ‘¡Felicitadme, porque ya he encontrado la oveja que se me había perdido!’
7 Os digo que hay también más alegría en el cielo por un pecador que se convierte, que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse.
8 “O bien, ¿qué mujer que tiene diez monedas y pierde una, no enciende una lámpara y barre la casa y busca con cuidado hasta encontrarla?
9 Y cuando la encuentra reúne a sus amigas y vecinas y les dice: ‘¡Felicitadme, porque ya he encontrado la moneda que había perdido!’
10 Os digo que así también hay alegría entre los ángeles de Dios por un pecador que se convierte.”
11 Contó Jesús esta otra parábola: “Un hombre tenía dos hijos.