5 Y si en algún pueblo no os quieren recibir, salid de él y sacudíos el polvo de los pies, para que les sirva de advertencia.
6 Salieron, pues, y fueron por todas las aldeas anunciando la buena noticia y sanando enfermos.
7 El rey Herodes oyó hablar de Jesús y de todo lo que hacía. Y no sabía qué pensar, porque unos decían que era Juan, que había resucitado;
8 otros, que había aparecido el profeta Elías, y otros, que era alguno de los antiguos profetas que había resucitado.
9 Pero Herodes dijo:–Yo mismo mandé que cortaran la cabeza a Juan. ¿Quién, pues, será este de quien oigo contar tantas cosas?Por eso Herodes tenía ganas de ver a Jesús.
10 Cuando los apóstoles regresaron, contaron a Jesús lo que habían hecho. Él, tomándolos aparte, los llevó a un pueblo llamado Betsaida.
11 Pero cuando la gente lo supo, le siguieron; y Jesús los recibió, les habló del reino de Dios y sanó a los enfermos.