17 Tened cuidado, porque os entregarán a las autoridades, os golpearán en las sinagogas
18 y hasta os conducirán ante gobernadores y reyes por causa mía; así podréis dar testimonio de mí ante ellos y ante los paganos.
19 Pero cuando os entreguen a las autoridades, no os preocupéis por lo que habéis de decir o por cómo decirlo, porque en aquel momento os dará Dios las palabras.
20 No seréis vosotros quienes habléis, sino que el Espíritu de vuestro Padre hablará por vosotros.
21 “Los hermanos entregarán a la muerte a sus hermanos, y los padres a sus hijos; y los hijos se levantarán contra sus padres, y los matarán.
22 Todo el mundo os odiará por causa mía, pero el que permanezca firme hasta el fin, será salvo.
23 Cuando os persigan en una ciudad huid a otra, pues os aseguro que el Hijo del hombre vendrá antes que hayáis recorrido todas las ciudades de Israel.