42 Judas y su ejército también avanzaron para dar la batalla, y cerca de seiscientos hombres del ejército del rey cayeron muertos.
43 Eleazar Avarán divisó un elefante protegido con armadura real, que sobresalía por encima de todos los demás, y pensó que el rey se encontraba en él.
44 Entonces dio su vida para salvar a su pueblo, y conquistó fama inmortal.
45 Corrió atrevidamente hacia él por en medio del batallón enemigo, matando gente a derecha e izquierda y haciendo que a uno y otro lado le abrieran paso.
46 Llegó hasta colocarse debajo del elefante, y lo atacó y lo mató. Pero el elefante, al desplomarse, cayó sobre Eleazar, y éste murió allí mismo.
47 Sin embargo, al ver los israelitas el poderío militar del rey y el ímpetu con que atacaban sus soldados, tuvieron que retirarse.
48 Parte del ejército del rey avanzó sobre Jerusalén para atacar a los israelitas, y el rey puso cerco a Judea y al monte Sión.