4 Durante esos cuarenta años no se les gastó la ropa, ni se les hincharon los pies.
5 Dense cuenta de que el Señor su Dios los ha corregido del mismo modo que un padre corrige a su hijo.
6 Cumplan, pues, los mandamientos del Señor su Dios, y hónrenlo y sigan las enseñanzas que él les ha dado.
7 Porque el Señor los va a llevar a una buena tierra, a un país lleno de arroyos, fuentes y manantiales que brotan en los valles y en los montes;
8 es una tierra donde hay trigo, cebada, viñedos, higueras, granados, olivos y miel.
9 En ese país no tendrán ustedes que preocuparse por la falta de alimentos, ni por ninguna otra cosa; en sus piedras encontrarán hierro, y de sus montes sacarán cobre.
10 Pero después que hayan comido y se sientan satisfechos, deben alabar al Señor su Dios por la buena tierra que les ha dado.