8 Ven crecer a sus hijos y a sus nietos,que a su lado gozan de seguridad.
9 Nada amenaza la paz de sus hogares;Dios no los castiga.
10 Su ganado es siempre fecundo;las crías nunca se malogran.
11 Sus hijos corretean y juegan como corderitos,
12 y alegres bailan y saltanal son del arpa, los tambores y las flautas.
13 Terminan su vida en la prosperidad;bajan tranquilos a la tumba.
14 A Dios le dicen: «¡Déjanos en paz,no queremos conocer tus leyes!