5 Por aquel tiempo, el rey Nabucodonosor hizo la guerra al rey Arfaxad en la gran llanura que está en la región de Ragues.
6 A Nabucodonosor se le unieron todos los habitantes de la región montañosa, y todos los que vivían junto a los ríos Tigris, Éufrates e Hidaspes y en las llanuras que estaban bajo el dominio de Arioc, rey de Elam. Así pues, innumerables pueblos se reunieron para sumarse al ejército de los descendientes de Queleúd.
7 El rey Nabucodonosor de Asiria mandó llamar a todos los habitantes de Persia y a todos los que vivían en occidente: a los habitantes de Cilicia, Damasco, el Líbano, el Antilíbano, a todos los que vivían en la costa,
8 en el Carmelo, en Galaad, en la Galilea superior, en la gran llanura de Esdrelón,
9 a todos los de Samaria y de sus ciudades, del occidente del Jordán hasta Jerusalén, a los de Batané, Quelús, Cadés, del arroyo que limita con Egipto, de Tafnes, Ramsés, y de todo el país de Gosén
10 hasta más allá de Tanis y de Menfis, y a todos los habitantes de Egipto hasta la frontera con Etiopía.
11 Pero los habitantes de esas regiones no hicieron caso del llamado del rey Nabucodonosor de Asiria y no fueron a ayudarle en la guerra, pues no le tenían miedo, sino que lo consideraban como un hombre sin aliados; así que insultaron a sus mensajeros y los despidieron con las manos vacías.