20 La guardia privada de Holofernes y los demás oficiales a su servicio salieron e hicieron entrar a Judit en la tienda.
21 Holofernes estaba recostado en su cama, debajo de un pabellón de púrpura bordado en oro y adornado con esmeraldas y piedras preciosas.
22 Cuando le dijeron que ella estaba allí, salió a la entrada de la tienda. Delante de él llevaban lámparas de plata.
23 Cuando Judit se presentó delante de él y de sus oficiales de servicio, todos se quedaron maravillados de su belleza. Ella se inclinó ante él en señal de reverencia, pero los criados la levantaron.