21 A los levitas les doy como propiedad esa décima parte que los israelitas deben entregar de sus productos, en pago del servicio que prestan en la tienda del encuentro.
22 Los demás israelitas no deberán acercarse a la tienda del encuentro, porque cometerían un pecado que les traería la muerte.
23 Los levitas serán los únicos que se ocuparán del servicio de la tienda del encuentro, y serán responsables de las faltas que cometan. Ésta será una ley permanente, que pasará de padres a hijos. Los levitas no tendrán territorio propio en Israel.
24 A ellos les he dado en propiedad la décima parte que los israelitas deben ofrecerme de sus productos. Por eso les he dicho que no tendrán territorio propio en Israel.»
25 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:
26 «Diles a los levitas que cuando reciban de los israelitas esa décima parte de sus productos que yo les he dado como su propiedad, deberán reservar un décimo de ella para ofrecérmelo a mí.
27 Ésa será su contribución, semejante a la contribución que hacen los israelitas cuando dan una parte de su trigo y de su vino.