9 Hubieras podido, en batalla campal,poner a los impíos en manos de los justos,o aniquilarlos en un solo instantepor medio de fieras salvajes,o con una severa orden de mando;
10 sin embargo, para darles oportunidad de arrepentirse,los castigaste poco a poco,sabiendo que eran malos por naturalezay perversos desde su nacimiento,y que nunca cambiarían su modo de pensar,
11 porque eran una nación maldita desde el comienzo.No fue por miedo a nadiepor lo que dejaste sin castigo sus pecados,
12 pues, ¿quién podrá pedirte cuentas de lo que hacesu oponerse a tu sentencia?¿Quién podrá acusarte de haber destruidonaciones que tú mismo hiciste?¿Quién puede levantarse contra tipara defender a los malvados?
13 Pues no existe ningún dios, fuera de ti,que tenga todo bajo su cuidadoy a quien tú tengas que dar cuentasde si has juzgado rectamente o no;
14 ni hay rey o gobernante que pueda hacerte frentepara defender a los que tú has castigado.
15 Puesto que eres justo, todo lo gobiernas con justicia;y juzgas indigno de tu podercondenar al que no merece castigo.