7 Tu pueblo esperó al mismo tiempola salvación de los inocentesy la perdición de sus enemigos,
8 pues con los mismos medios castigaste a éstosy nos honraste llamándonos a ti.
9 Los piadosos herederos de tus bendicionesofrecieron sacrificios a escondidas;de común acuerdo se comprometieron a cumplir la ley divinay a compartir la prosperidad y los peligros,y cantaron ya los himnos tradicionales.
10 Con estos himnos contrastabanlos gritos confusos de los enemigosy los quejidos dolorososde quienes lloraban a sus hijos muertos.
11 Señores y esclavos sufrieron igual castigo;el hombre del pueblo corrió igual suerte que el rey.
12 Todos por igual tuvieron innumerables muertos,que de igual forma perecieron.Los vivos no se daban abasto para enterrarlos,pues en un instante pereció lo mejor de su nación.
13 Así ellos, que confiados en su magiano habían creído en ninguna de las advertencias,reconocieron, al ver muertos a sus hijos mayores,que nuestro pueblo era hijo de Dios.