14 Débil es la inteligencia de los hombres,y falsas muchas veces sus reflexiones;
15 el cuerpo mortal es un peso para el alma;estando hecho de barro, oprime la mente,en la que bullen tantos pensamientos.
16 Con dificultad imaginamos las cosas de la tierra,y trabajosamente hallamos lo que está a nuestro alcance.Pero, ¿quién puede descubrir las cosas celestiales?
17 Nadie puede conocer tus planessino aquel a quien das sabiduríay sobre quien desde el cielo envías tu santo espíritu.
18 Gracias a la sabiduríahan podido los hombres seguir el buen caminoy aprender lo que te agrada:fueron salvados gracias a ella.»