23 Por otra parte, si los judíos abandonan su incredulidad serán injertados de nuevo, pues Dios tiene poder para volver a injertarlos.
24 Porque si tú, que no eres judío, fuiste cortado de un olivo silvestre e injertado contra lo natural en el olivo auténtico, ¡cuánto más los judíos, que son las ramas naturales del olivo auténtico, serán injertados nuevamente en su propio olivo!
25 Hermanos, quiero que sepáis este designio secreto de Dios, para que no os creáis sabios: En parte el pueblo de Israel se ha endurecido, pero solo hasta que hayan entrado todos los que no son de Israel.
26 Cuando esto suceda, todo Israel alcanzará la salvación, pues la Escritura dice:“De Sión vendrá el libertadory apartará de Jacob la maldad.
27 Este será mi pacto con elloscuando yo quite sus pecados.”
28 En cuanto al evangelio, los judíos son tenidos por enemigos de Dios a fin de daros oportunidad a vosotros; pero Dios todavía los ama, porque escogió a sus antepasados.
29 Pues lo que Dios da no lo quita, ni revoca su llamamiento.