9 Te tomé de lo más remoto de la tierra, te llamé de los rincones más lejanos, y te dije: “Tú eres mi siervo, te elegí y no te hice a un lado”.
10 No temas, estoy contigo. Yo soy tu Dios, no tengas miedo. Te fortaleceré, sí, te ayudaré. Te salvaré con mi mano victoriosa.
11 »Mira, todos los que están furiosos contigo serán avergonzados y caerán en desgracia. Los que se oponen a ti quedarán en nada y perecerán.
12 Buscarás a todos los que se te enfrentaron, pero no los hallarás. Los que te hicieron la guerra, quedarán en nada.
13 Porque yo, el SEÑOR tu Dios, te tomo de la mano. Yo soy el que te dice: “Te ayudaré, no tengas miedo”.
14 »No temas, gusanito Jacob, oruguita Israel. El SEÑOR dice: “Yo mismo te ayudaré”. El Santo Dios de Israel te salvará.
15 Fíjate, te convertiré en una trilladora nueva y con muchos dientes. Trillarás los montes, los aplastarás y harás que las colinas queden hechas paja.