12 »Escúchame, pueblo de Jacob, Israel, a quien estoy llamando: Yo soy Dios, el primero y el último.
13 Mi mano echó los cimientos de la tierra; mi mano extendió los cielos. Cuando yo pronuncio el nombre de ellos, se ponen de pie al instante.
14 Vengan todos y escúchenme. ¿Acaso alguno de ustedes anunció lo que iba a pasar? Ciro, el elegido del SEÑOR, cumplirá el plan del Señor: Atacará a Babilonia y a los caldeos.
15 Yo mismo lo he dicho, lo he llamado y lo he traído. Su misión se llevará a feliz término.
16 Vengan a mí, oigan esto: Yo no he hablado en secreto. Cuando todo esto sucedía, yo estaba ahí. El Señor DIOS me envía ahora con su Espíritu».
17 El SEÑOR, tu Salvador, el Santo Dios de Israel, dice esto: «Yo soy el SEÑOR tu Dios, quien te enseña el bien y te lleva por el camino que debes andar.
18 Si tan solo hubieras hecho caso de mis mandamientos, tu prosperidad habría fluido como un río y tu salvación como las olas del mar.