7 El Señor DIOS me ayuda, y los insultos no me hieren. Por eso me mantendré firme, y sé que no seré avergonzado.
8 Ya viene el que demostrará que tengo razón. ¿Me va a demandar alguien? Presentémonos juntos al tribunal. ¿Quién me va a acusar? Que venga y hagamos un careo.
9 Miren, el Señor DIOS me está ayudando. ¿Quién se atreverá a condenarme? Todos ellos se desgastarán como un vestido; serán comidos por la polilla.
10 ¿Quién de ustedes respeta al SEÑOR y obedece a su siervo? El que ande sin luz en la oscuridad, ponga su confianza en el SEÑOR y apóyese en su Dios.