13 Como el que recibe consuelo de la mamá, así yo los consolaré a ustedes. En Jerusalén serán consolados».
14 Ustedes verán, su corazón se pondrá alegre y su cuerpo se renovará como la hierba. Se sentirá el poder del SEÑOR entre sus siervos y su enojo entre sus enemigos.
15 Porque el SEÑOR viene como un fuego y sus carros como una tormenta para castigar con su furia y darles escarmiento con llamas de fuego.
16 Porque el SEÑOR castigará con fuego y con su espada a toda la humanidad. El SEÑOR matará a muchos.
17 «Los que se santifiquen y purifiquen en los jardines sagrados siguiendo a uno que va en medio, los que comen carne de cerdo, ratas y otras cosas asquerosas, encontrarán su fin todos juntos». El SEÑOR lo ha decidido así.
18 »Yo conozco los hechos y los pensamientos de ellos. Vengo a reunir a gente de todas las naciones e idiomas. Vendrán y verán mi gloria.
19 »Haré una señal entre ellos y enviaré algunos sobrevivientes a las naciones: a Tarsis, Pul, Lidia (famosa por sus arqueros), Mésec, Tubal y Grecia, a países lejanos que nunca han oído de mí ni han visto mi gloria. Ellos les contarán acerca de mi gloria entre las naciones.