15 El adúltero espera a que llegue la noche, dice: “Nadie me verá”, y se cubre la cara.
16 Se mete en las casas por la noche, y se encierra en su casa durante el día, y nunca ve la luz.
17 La mañana le incomoda; no le teme a la noche más oscura.
18 »Él es sólo paja que flota en el agua; su parte en la tierra está maldita. Nadie caminará hacia su viña.
19 Así como la sequía y el calor hacen desaparecer el agua que la nieve produjo, así la muerte hará desaparecer a aquellos pecadores.
20 Su mamá los olvidará, el gusano los encontrará sabrosos. Nadie se acordará de ellos. La maldad será quebrantada como se quiebra un palo.
21 Maltratan a la mujer estéril, a la que nunca tuvo hijos. Se niegan a ayudar a las viudas.