23 pero nosotros anunciamos a Cristo crucificado. Este mensaje resulta ofensivo para los judíos y les parece una tontería a los que no son judíos,
24 pero para los que han sido llamados por Dios, judíos o no, este mensaje es poder y sabiduría de Dios.
25 Pues la tontería de Dios es más sabia que la sabiduría de los hombres, y la debilidad de Dios es más fuerte que la fortaleza de los hombres.
26 Ahora, fíjense hermanos: según las normas humanas, no hay entre ustedes muchos sabios, tampoco muchos que tengan influencias, ni que pertenezcan a familias importantes. Pero a pesar de todo, Dios los ha llamado.
27 Pero Dios prefirió usar las tonterías de este mundo para avergonzar a los sabios, y prefirió usar a los débiles de este mundo para avergonzar a los poderosos.
28 Dios prefirió lo que el mundo cree que no es importante, lo que desprecia y lo que no significa nada. Prefirió todo eso para destruir lo que el mundo cree que es importante.
29 Dios hizo esto para que nadie pueda alabarse a sí mismo delante de él.