7 Cuando llegamos al mundo, no traíamos nada y cuando morimos no nos podemos llevar nada.
8 Por eso, si tenemos alimentos y ropa, podemos darnos por satisfechos.
9 Los que quieren ser ricos caen en la trampa de la tentación. Empiezan a tener deseos descabellados que los perjudican. Eso los hunde en la ruina total.
10 El amor por el dinero causa toda clase de males. Por querer tener más y más dinero, algunos se han desviado de la fe y se han causado gran sufrimiento.
11 Eres un hombre de Dios, así que evita todo eso. Esfuérzate por seguir una vida de rectitud, dedicarte a Dios y tener fe, amor, constancia y humildad.
12 Mantener la fe es como una competencia. Haz todo lo posible por ganar la carrera y obtener la vida eterna. Dios te llamó para tener esa vida cuando declaraste la gran verdad de tu fe ante mucha gente.
13 Te ordeno delante de Dios, quien le da vida a todo, y de Jesucristo, quien declaró esa misma verdad cuando dio testimonio ante Poncio Pilato,