32 Luego Samuel ordenó:— Traedme a Agag, el rey de Amalec.Agag se acercó a él confiado pensando que ya había superado el mal trago de la muerte.
33 Pero Samuel le dijo:— Así como tu espada dejó a muchas madres sin hijos, ahora tu madre quedará privada de hijos, igual que ellas.Y Samuel descuartizó a Agag ante el Señor en Guilgal.
34 Luego se marchó a Ramá y Saúl volvió a su casa de Guibeá de Saúl.
35 Samuel ya no volvió a ver en su vida a Saúl, pero sentía pena por él, porque el Señor se había arrepentido de haberlo nombrado rey de Israel.