18 Entonces Samuel se lo contó todo, sin omitir nada. Elí comentó:— Él es el Señor, que haga lo que mejor le parezca.
19 Samuel seguía creciendo y el Señor lo protegía, sin dejar de cumplir ni una sola de sus palabras.
20 Así supo todo Israel, desde Dan hasta Berseba*, que Samuel era un profeta acreditado ante Dios.
21 El Señor siguió manifestándose en Siló, donde revelaba su palabra a Samuel.