12 Cuando los comentarios de Israel llegaron a oídos del rey, él mandó a decir a los sacerdotes Sadoc y Abiatar:— Decid a los ancianos de Judá: “¿Por qué vais a ser los últimos en restablecer al rey en su palacio?
13 Vosotros sois mis hermanos de sangre, ¿seréis los últimos en restablecer al rey?”.
14 Y a Amasá le diréis: “Tú eres mi pariente. Que Dios me castigue si no te nombro general vitalicio del ejército en sustitución de Joab”.
15 David se ganó a todos los de Judá de forma unánime, y ellos mandaron a decir al rey:— Regresa con toda tu gente.
16 El rey emprendió el regreso y llegó al Jordán. Los de Judá fueron a Guilgal para salir al encuentro del rey y ayudarle a cruzar el Jordán.
17 Simeí, el hijo de Guerá, benjaminita de Bajurín, se apresuró a bajar con los hombres de Judá al encuentro del rey David.
18 Iba acompañado por mil hombres de Benjamín. También llegó Sibá, el criado de la familia de Saúl, con sus quince hijos y veinte siervos. Ambos llegaron al Jordán antes que el rey