25 Os aseguro que no volveré a beber de este fruto de la vid hasta el día aquel en que beba un vino nuevo en el reino de Dios.
26 Cantaron después el himno* y salieron hacia el monte de los Olivos.
27 Jesús les dijo:— Todos me vais a abandonar, porque así lo dicen las Escrituras: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas.
28 Pero después de mi resurrección iré delante de vosotros a Galilea.
29 Pedro le dijo:— ¡Aunque todos te abandonen, yo no te abandonaré!
30 Jesús le contestó:— Te aseguro que hoy, esta misma noche, antes de que el gallo cante por segunda vez, tú me habrás negado tres veces.
31 Pedro insistió, asegurando:— ¡Yo no te negaré, aunque tenga que morir contigo!Y lo mismo decían todos los demás.