8 Cuando salió de Egipto, no abandonó la prostitución sino que continuó tan depravada como en su juventud, cuando los egipcios se acostaban con ella, le manoseaban los senos y la tenían como prostituta.
9 »Entonces la entregué a sus amantes asirios, a quienes ella tanto deseaba.
10 Ellos la desnudaron, se llevaron a sus hijos como esclavos y luego la mataron. Después de recibir su castigo, su mala fama llegó a oídos de todas las mujeres de la tierra.
11 »Sin embargo, Aholibá siguió los mismos pasos, a pesar de que vio todo lo que le había ocurrido a su hermana Aholá. Se corrompió todavía más y se entregó por completo a sus pasiones sexuales y a la prostitución.
12 Aduló a todos los oficiales asirios, esos capitanes y comandantes con hermosos uniformes, esos jóvenes que conducían carros de guerra, todos apuestos y deseables.
13 Yo vi cómo iba corrompiéndose, igual que su hermana mayor.
14 »Luego llevó su prostitución a tal extremo que se enamoró de imágenes pintadas en un muro, imágenes de oficiales militares babilonios con llamativos uniformes rojos,