1 Y he aquí que mientras Jeroboam quemaba incienso junto al altar, vino de Judá a Bet-el un hombre de Dios enviado por la palabra de Jehová.
2 Él clamó contra el altar por palabra de Jehová y dijo: Altar, altar, así ha dicho Jehová: He aquí que a la casa de David le nacerá un hijo, llamado Josías, el que sacrificará sobre ti a los sacerdotes de los lugares altos que queman sobre ti incienso, y sobre ti quemarán huesos de hombres.
3 Y aquel mismo día dio una señal, diciendo: Ésta es la señal de que Jehová ha hablado: He aquí que el altar se quebrará, y la ceniza que está sobre él se esparcirá.
4 Y aconteció que cuando el rey Jeroboam oyó la palabra del hombre de Dios, que había clamado contra el altar de Bet-el, extendió su mano desde el altar y dijo: ¡Prendedle! Pero la mano que había extendido contra él se le secó, y no la pudo contraer.