2 Y acudieron algunos y dieron aviso a Josafat, diciendo: Contra ti viene una gran multitud del otro lado del mar, de Siria; y he aquí, ellos están en Hazezón-tamar, que es En-gadi.
3 Entonces él tuvo temor; y Josafat se propuso consultar a Jehová, e hizo pregonar ayuno a todo Judá.
4 Y se reunieron los de Judá para pedir socorro a Jehová; y también de todas las ciudades de Judá vinieron a pedir ayuda a Jehová.
5 Entonces Josafat se puso de pie en medio de la congregación de Judá y de Jerusalén, en la casa de Jehová, delante del atrio nuevo,
6 y dijo: Jehová, Dios de nuestros padres, ¿no eres tú Dios en los cielos, y gobiernas tú sobre todos los reinos de las naciones? ¿No hay en tu mano tal fuerza y poder que no hay quien te resista?
7 Dios nuestro, ¿no expulsaste tú a los habitantes de esta tierra delante de tu pueblo Israel, y la diste a la descendencia de tu amigo Abraham para siempre?
8 Y ellos han habitado en ella y te han edificado en ella santuario a tu nombre, diciendo: