19 Y la mujer de la casa tomó una manta y la extendió sobre la boca del pozo, y tendió sobre ella el grano trillado; y no se notaba nada.
20 Y cuando llegaron los criados de Absalón a la casa de la mujer, le dijeron: ¿Dónde están Ahimaas y Jonatán? Y la mujer les respondió: Ya han pasado el vado de las aguas. Y como ellos los buscaron y no los hallaron, volvieron a Jerusalén.
21 Y sucedió que después que ellos se hubieron ido, aquéllos salieron del pozo y se fueron y dieron aviso al rey David, y le dijeron: Levantaos y daos prisa a pasar las aguas, porque Ahitofel ha dado tal consejo contra vosotros.
22 Entonces David se levantó, y todo el pueblo que estaba con él, y pasaron el Jordán antes que amaneciese; ni siquiera faltó uno que no pasase el Jordán.
23 Y Ahitofel, viendo que no se había seguido su consejo, ensilló su asno, y se levantó y se fue a su casa en su ciudad; y después de poner su casa en orden, se ahorcó y murió, y fue sepultado en el sepulcro de su padre.
24 Y David llegó a Mahanaim, y Absalón pasó el Jordán con toda la gente de Israel.
25 Y Absalón nombró a Amasa jefe del ejército en lugar de Joab. Amasa era hijo de un hombre de Israel llamado Itra, el cual se había llegado a Abigail hija de Nahas, hermana de Sarvia, madre de Joab.