15 Y David tuvo un gran deseo y dijo: ¡Quién me diera a beber del agua del pozo de Belén que está junto a la puerta!
16 Entonces los tres valientes irrumpieron en el campamento de los filisteos, y sacaron agua del pozo de Belén que estaba junto a la puerta, se la llevaron, y la trajeron a David; pero él no la quiso beber, sino que la derramó ante Jehová,
17 y dijo: Lejos esté de mí, oh Jehová, que yo haga esto. ¿No es esto como la sangre de los hombres que fueron con peligro de su vida? Y no quiso beberla. Los tres valientes hicieron esto.
18 Y Abisai, hermano de Joab, hijo de Sarvia, era el principal de los treinta; éste alzó su lanza contra trescientos, a quienes mató, y tuvo renombre entre los tres.
19 Él era el más destacado de los treinta, y llegó a ser su jefe, pero no igualó a los tres primeros.
20 Después, Benaía hijo de Joiada, hijo de un hombre valiente, grande en hechos, de Cabseel. Éste mató a dos leones de Moab; y él mismo descendió y mató a un león en medio de un foso un día de nieve.
21 También mató él a un egipcio, hombre de gran estatura; y tenía el egipcio una lanza en la mano, pero descendió contra él con un palo, y le arrebató al egipcio la lanza de la mano y lo mató con su propia lanza.