33 Y endechando el rey al mismo Abner, decía:¿Había de morir Abner como muere un insensato?
34 Tus manos no estaban atadas ni tus pies sujetos con grilletes;caíste como los que caen delante de hombres malos.Y todo el pueblo volvió a llorar por él.
35 Entonces todo el pueblo vino a persuadir a David a que comiera antes que acabara el día. Pero David juró, diciendo: Así me haga Dios y aun me añada, si antes que se ponga el sol pruebo yo pan o cualquier otra cosa.
36 Y todo el pueblo supo esto y le agradó, pues todo lo que el rey hacía agradaba a todo el pueblo.
37 Y todo el pueblo y todo Israel entendieron aquel día que no había procedido del rey el matar a Abner hijo de Ner.
38 Y el rey dijo a sus siervos: ¿No sabéis que un príncipe y un gran hombre ha caído hoy en Israel?
39 Y yo soy débil hoy, aunque ungido rey; y estos hombres, los hijos de Sarvia, son más duros que yo. Jehová pague al que mal hace, conforme a su maldad.