1 Y aconteció que, cuando ya el rey habitaba en su casa, después que Jehová le había dado reposo de todos sus enemigos de alrededor,
2 dijo el rey al profeta Natán: Mira ahora, yo habito en una casa de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas.
3 Y Natán dijo al rey: Anda y haz todo lo que está en tu corazón, porque Jehová está contigo.
4 Y aconteció aquella noche que vino la palabra de Jehová a Natán, diciendo:
5 Ve y di a mi siervo David: Así ha dicho Jehová: ¿Tú me has de edificar una casa en la que yo more?