28 Y él estuvo allí con Jehová cuarenta días y cuarenta noches; no comió pan ni bebió agua. Y escribió en tablas las palabras del convenio, los diez mandamientos.
29 Y aconteció que descendiendo Moisés del monte Sinaí con las dos tablas del testimonio en su mano, mientras descendía del monte, no sabía él que la tez de su rostro resplandecía, después que hubo hablado con Dios.
30 Y Aarón y todos los hijos de Israel miraron a Moisés, y he aquí, la tez de su rostro era resplandeciente, y tuvieron miedo de acercarse a él.
31 Y los llamó Moisés; y Aarón y todos los jefes de la congregación volvieron a él, y Moisés les habló.
32 Y después se acercaron todos los hijos de Israel, a los cuales mandó todo lo que Jehová le había dicho en el monte Sinaí.
33 Y cuando hubo acabado Moisés de hablar con ellos, puso un velo sobre su rostro.
34 Y cuando se presentaba Moisés delante de Jehová para hablar con él, se quitaba el velo hasta que salía; y cuando salía, hablaba con los hijos de Israel lo que se le había mandado;