30 Y él respondió: Estas siete corderas tomarás de mi mano para que me sirvan de testimonio de que yo cavé este pozo.
31 Por esto llamó a aquel lugar Beerseba, porque allí juraron ambos.
32 Así hicieron pacto en Beerseba; y se levantaron Abimelec y Ficol, jefe de su ejército, y volvieron a la tierra de los filisteos.
33 Y plantó Abraham un bosque en Beerseba e invocó allí el nombre de Jehová, el Dios eterno.
34 Y moró Abraham en la tierra de los filisteos muchos días.