9 y se fue Esaú a Ismael y tomó para sí por esposa a Mahalat, hija de Ismael, hijo de Abraham, hermana de Nebaiot, además de sus otras esposas.
10 Y salió Jacob de Beerseba y se fue a Harán;
11 y llegó a cierto lugar y durmió allí, porque ya el sol se había puesto; y tomó de las piedras de aquel paraje y las puso a su cabecera, y se acostó en aquel lugar.
12 Y soñó, y he aquí una escalera que estaba apoyada en tierra, cuyo extremo tocaba en el cielo; y he aquí ángeles de Dios que subían y descendían por ella.
13 Y he aquí, Jehová estaba en lo alto de ella, y dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham, tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia.
14 Y será tu descendencia como el polvo de la tierra, y te extenderás al occidente, y al oriente, y al norte y al sur; y todas las familias de la tierra serán benditas en ti y en tu descendencia.
15 Y he aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho.