6 Y vino a ellos José por la mañana y los miró, y he aquí, vio que estaban tristes.
7 Y él preguntó a aquellos oficiales de Faraón que estaban con él en la prisión de la casa de su señor, diciendo: ¿Por qué hoy están decaídos vuestros semblantes?
8 Y ellos le dijeron: Hemos soñado un sueño, y no hay quien lo interprete. Entonces les dijo José: ¿No son de Dios las interpretaciones? Contádmelo ahora.
9 Entonces el jefe de los coperos contó su sueño a José y le dijo: Yo soñé que veía una vid delante de mí,
10 y en la vid, tres sarmientos; y ella como que brotaba y arrojaba su flor, viniendo a madurar sus racimos de uvas.
11 Y que la copa de Faraón estaba en mi mano, y tomaba yo las uvas, y las exprimía en la copa de Faraón y ponía yo la copa en la mano de Faraón.
12 Y le dijo José: Ésta es su interpretación: Los tres sarmientos son tres días.