8 Y ellos le dijeron: Hemos soñado un sueño, y no hay quien lo interprete. Entonces les dijo José: ¿No son de Dios las interpretaciones? Contádmelo ahora.
9 Entonces el jefe de los coperos contó su sueño a José y le dijo: Yo soñé que veía una vid delante de mí,
10 y en la vid, tres sarmientos; y ella como que brotaba y arrojaba su flor, viniendo a madurar sus racimos de uvas.
11 Y que la copa de Faraón estaba en mi mano, y tomaba yo las uvas, y las exprimía en la copa de Faraón y ponía yo la copa en la mano de Faraón.
12 Y le dijo José: Ésta es su interpretación: Los tres sarmientos son tres días.
13 Al cabo de tres días Faraón levantará tu cabeza, y te restituirá a tu puesto y darás la copa a Faraón en su mano, como solías hacerlo cuando eras su copero.
14 Acuérdate, pues, de mí cuando tengas ese bien, y te ruego que uses conmigo de misericordia, y hagas mención de mí a Faraón y me saques de esta casa.