27 ¿Por qué, pues, no has reprendido ahora a Jeremías de Anatot, que os profetiza?
28 Porque él nos envió a decir en Babilonia: Largo será el cautiverio; edificad casas y habitadlas; plantad huertos y comed el fruto de ellos.
29 Y el sacerdote Sofonías había leído esta carta a oídos del profeta Jeremías.
30 Y vino la palabra de Jehová a Jeremías, diciendo:
31 Envía a decir a todos los cautivos: Así ha dicho Jehová de Semaías, el nehelamita: Por cuanto os profetizó Semaías sin que yo lo hubiera enviado, y os hizo confiar en mentira,
32 por eso, así ha dicho Jehová: He aquí que yo castigaré a Semaías, el nehelamita, y a su descendencia; no tendrá varón que more en medio de este pueblo ni verá el bien que haré yo a mi pueblo, dice Jehová, porque contra Jehová ha hablado rebelión.