5 Los que de vosotros puedan, dijo, desciendan conmigo, y si hay algún delito en este varón, acúsenle.
6 Y deteniéndose entre ellos no más de ocho o diez días, venido a Cesarea, al siguiente día se sentó en el tribunal y mandó que Pablo fuese traído.
7 Al llegar éste, le rodearon los judíos que habían venido de Jerusalén, presentando contra Pablo muchas y graves acusaciones, las cuales no podían probar;
8 Pablo se defendía, diciendo: Ni contra la ley de los judíos, ni contra el templo ni contra César he pecado en nada.
9 Pero Festo, queriendo congraciarse con los judíos, respondiendo a Pablo, dijo: ¿Quieres subir a Jerusalén y allá ser juzgado acerca de estas cosas delante de mí?
10 Y Pablo dijo: Ante el tribunal de César estoy, donde debo ser juzgado. A los judíos no les he hecho injuria alguna, como tú sabes muy bien.
11 Porque si alguna injuria o cosa alguna digna de muerte he hecho, no rehúso morir; pero si nada hay de las cosas de que éstos me acusan, nadie puede entregarme a ellos. A César apelo.