74 que, librados de nuestros enemigos,sin temor lo serviríamos
75 en santidad y en justicia delante de éltodos nuestros días.
76 Y tú, niño, profeta del Altísimoserás llamado,porque irás delante de la presencia del Señorpara preparar sus caminos,
77 para dar conocimiento de salvacióna su pueblo,para perdón de sus pecados,
78 por la entrañable misericordiade nuestro Dios,con que nos visitódesde lo alto la aurora,
79 para dar luz a los que habitanen tinieblas y en sombra de muerte,para encaminar nuestros piespor camino de paz».
80 El niño crecía y se fortalecía en espíritu, y estuvo en lugares desiertos hasta el día de su manifestación a Israel.