15 Entonces se incorporó el que había muerto y comenzó a hablar. Y lo dio a su madre.
16 Todos tuvieron miedo, y glorificaban a Dios diciendo: «Un gran profeta se ha levantado entre nosotros», y «Dios ha visitado a su pueblo.»
17 Y se extendió la fama de él por toda Judea y por toda la región de alrededor.
18 Los discípulos de Juan le dieron las nuevas de todas estas cosas. Y llamó Juan a dos de sus discípulos,
19 y los envió a Jesús para preguntarle: «¿Eres tú el que había de venir o esperaremos a otro?»
20 Cuando, pues, los hombres vinieron a él, le dijeron:—Juan el Bautista nos ha enviado a ti para preguntarte: “¿Eres tú el que había de venir o esperaremos a otro?”
21 En esa misma hora sanó a muchos de enfermedades, plagas y espíritus malos, y a muchos ciegos les dio la vista.