14 Me voy diluyendo, como el agua;tengo todos los huesos dislocados.El corazón, dentro del pecho,se me derrite como la cera.
15 Tengo seca, muy seca, la garganta;la lengua se me pega al paladar;¡me has lanzado al polvo de la muerte!
16 Me ha cercado una banda de malvados;¡me tienen rodeado, como perros!¡Han taladrado mis manos y mis pies!
17 Puedo contarme todos los huesos,mientras ellos se regodean al verme.
18 Echan a la suerte mis vestidosy se los reparten por sorteo.
19 Pero tú, Señor, ¡no te alejes!Tú eres mi fuerza, ¡ven pronto en mi ayuda!
20 ¡Rescata de la espada y de esos perrosla única vida que tengo!