2 a no haber estado Jehová por nosotros, cuando se levantaron contra nosotros los hombres,
3 vivos nos habrían tragado entonces, cuando se encendió su furor contra nosotros.
4 Entonces nos habrían inundado las aguas; sobre nuestra alma hubiera pasado el torrente:
5 Hubieran entonces pasado sobre nuestra alma las aguas soberbias.
6 Bendito Jehová, que no nos dio por presa a los dientes de ellos.
7 Nuestra alma escapó cual ave del lazo de los cazadores; se rompió el lazo, y escapamos nosotros.
8 Nuestro socorro está en el nombre de Jehová, que hizo el cielo y la tierra.