18 les dijo:«Así dice el Dios de Israel: Yo los saqué a ustedes de Egipto. Yo los libré del poder de ese pueblo y de las naciones que los tenían dominados. A pesar de eso, ustedes me han rechazado y ahora quieren tener un rey.
19 Parece que se han olvidado de que soy yo quien siempre los ayuda en todos sus problemas.»Pero no importa. Ahora preséntense ante mí por tribus y familias».
20 Los israelitas así lo hicieron, y echaron suertes y ganó la tribu de Benjamín.
21 Luego echaron suertes entre las familias de Benjamín y ganó la familia de Matrí. Volvieron a echar suertes, y Saúl resultó elegido. Sin embargo, no lo podían encontrar.
22 Entonces le consultaron a Dios si Saúl estaba allí, y Dios respondió que estaba escondido entre el equipaje.
23 Rápidamente fueron a sacarlo de allí. Y cuando Saúl se presentó en medio de todos, se dieron cuenta de que era muy alto. No había nadie que le pasara de los hombros.
24 Entonces Samuel le dijo a todo el pueblo:—¡Aquí tienen al hombre elegido por Dios para que sea su rey! ¡No hay nadie que se le compare!Los israelitas gritaron a una voz: «¡Viva el rey!»