24 »Pero si el santuario les queda muy lejos, y no pueden llevar la décima parte de todo lo que Dios les ha dado,
25 harán lo siguiente: venderán esa parte y llevarán el dinero al santuario.
26 Cuando ustedes y sus familias lleguen allá, comprarán con ese dinero toda la comida que necesiten: vacas, ovejas, vino, cerveza, y cualquier otra cosa. Entonces celebrarán una gran fiesta en honor de nuestro Dios.
27-29 »No se olviden de compartir sus productos con los de la tribu de Leví que viven en su ciudad, pues a ellos no se les dieron tierras para cultivar y a ustedes sí.»Cada tres años apartarán la décima parte de todo lo que cosechen durante el año, y la guardarán en la ciudad. Así, los de la tribu de Leví tendrán el alimento que necesiten. No sólo ellos podrán tomar alimentos de allí, sino también los huérfanos, las viudas y los refugiados que vivan en la ciudad. Si obedecen estas instrucciones, Dios los bendecirá y todo les saldrá bien».