9 Cuando Lía se dio cuenta de que ya no podía tener más hijos, tomó a su esclava Zilpá y se la dio a Jacob como esposa.
10 Zilpá tuvo un hijo con Jacob,
11 al que Lía le puso por nombre Gad, que significa «buena suerte», porque dijo: «¡Qué buena suerte he tenido!»
12 Por segunda vez Zilpá tuvo un hijo con Jacob,
13 y Lía le puso por nombre Aser, que significa «dicha» pues dijo: «¡Qué dichosa soy! ¡Y así me van a considerar mis amigas!»
14 Un día, durante la cosecha del trigo, Rubén salió al campo y encontró unas frutas llamadas mandrágoras. Entonces se las llevó a su madre Lía. Al ver las frutas, Raquel le rogó a Lía que le diera algunas,
15 pero Lía le respondió:—Ya me quitaste el marido, ¿y ahora quieres quitarme las frutas que me trajo mi hijo?Raquel le propuso:—Si me das las mandrágoras, Jacob dormirá contigo esta noche.