13 Haré con ese país todo lo que dije contra las otras naciones. Cumpliré las amenazas que anunció mi profeta Jeremías, y que han quedado escritas en este libro.
14 También los babilonios quedarán bajo el dominio de naciones y reyes más poderosos. De ese modo los castigaré por todo el mal que han hecho”».
15 El Dios de Israel me dijo:«Jeremías, esta copa que tengo en la mano representa mi enojo. Tómala y haz que beban de ella todas las naciones a las que voy a enviarte.
16 Esas naciones comenzarán a tambalearse, y sus habitantes se volverán locos por causa de la guerra que voy a enviar contra ellos».
17 Yo recibí la copa de las manos de Dios, y se la di a beber a todas las naciones a las que él me envió.
18 También se la di a los habitantes de Jerusalén y de las ciudades de Judá, y a sus gobernantes, para destruirlos. Sus ciudades quedaron convertidas en ruinas. Hasta el momento en que esto se escribe, esas ciudades son motivo de espanto, de burla y de insultos.
19 También les di la copa del castigo al rey de Egipto, a sus jefes y oficiales, a todo su pueblo,