1 Cuando Joacín, hijo de Josías comenzó a reinar sobre Judá, Dios le habló a Jeremías en Jerusalén, y le dijo:
2 «Ve al patio de mi templo. Quiero que hables con la gente de toda Judá que viene a adorarme. Comunícales todo lo que te voy a decir.
3 Si te hacen caso y dejan de hacer lo malo, entonces ya no los castigaré como había pensado hacerlo.
4 Y éste es el mensaje que debes darles:“Ustedes no me obedecieron ni siguieron las enseñanzas que les di
5 por medio de mis profetas. Una y otra vez los he enviado para hablar con ustedes, pero no han querido escucharlos.
6 Por eso, así como destruí el santuario de Siló, también destruiré el templo de Jerusalén, y esta ciudad será objeto de burla y de insulto”».