18 Si no se rinden, entonces el ejército babilonio conquistará la ciudad y le prenderá fuego, y usted no podrá escapar.
19 El rey Sedequías me respondió:—Francamente, tengo miedo de los judíos que se han unido a los babilonios. Si llego a caer en sus manos, no me irá nada bien.
20 Yo le aseguré:—Dios ha dicho que si Su Majestad obedece, todo saldrá bien y esos judíos no le harán ningún daño.
21 Por el contrario, si Su Majestad no se rinde ante los babilonios,
22 todas las mujeres que aún quedan en su palacio caerán en manos de los jefes del rey de Babilonia. Entonces esas mismas mujeres le dirán a Su Majestad:“Tus amigos te engañaron y te vencieron.¡Eso te pasa por confiar en ellos!Tus amigos te abandonaron por completo,y ahora estás con el agua hasta el cuello”.
23 »Todas las mujeres y los hijos de Su Majestad caerán bajo el poder de los babilonios, y la ciudad será quemada. ¡Ni siquiera usted logrará escapar!
24 Sedequías me amenazó:—Escúchame, Jeremías: si en algo aprecias tu vida, más te vale quedarte callado, y que nadie sepa nada de esto.