12 Los cautivos y los despojos de la guerra fueron llevados ante Moisés, Eleazar el sacerdote y el resto del pueblo de Israel que estaba acampando en la llanura de Moab, junto al río Jordán, frente a Jericó.
13 Moisés, Eleazar el sacerdote y todos los jefes del pueblo salieron a encontrar al ejército victorioso,
14 pero Moisés se enojó con los oficiales del ejército y los comandantes de batallón.
15 «¿Por qué dejaron con vida a las mujeres? —les preguntó—.
16 Ellas fueron las que siguieron el consejo de Balán y causaron gran daño al pueblo de Israel, haciendo que adorara a Baal Peor, y son la causa de la plaga que nos destruyó.
17 Maten pues a los niños varones y a todas las mujeres que hayan tenido relación sexual.
18 Solamente las muchachas vírgenes podrán vivir. Con ellas pueden quedarse.