27 Jehová te herirá con las úlceras de Egipto, y con almorranas, y con sarna y con comezón, de los que no podrás ser curado.
28 Jehová te herirá con locura, y con ceguedad y con turbación de corazón.
29 Y andarás a tientas al mediodía, como anda a tientas el ciego en la oscuridad, y no serás prosperado en tus caminos; y no serás sino oprimido y robado todos los días, y no habrá quien te salve.
30 Te desposarás con una mujer, y otro hombre dormirá con ella; edificarás casa y no habitarás en ella; plantarás viña y no la disfrutarás.
31 Matarán tu buey delante de tus ojos, y tú no comerás de él; tu asno te será arrebatado delante de ti, y no se te devolverá; tus ovejas serán dadas a tus enemigos, y no tendrás quien te las rescate.
32 Tus hijos y tus hijas serán entregados a otro pueblo, y tus ojos lo verán y desfallecerán por ellos todo el día; y no habrá fuerza en tu mano.
33 El fruto de tu tierra y de todo tu trabajo lo comerá un pueblo que no has conocido, y no serás sino oprimido y quebrantado todos los días.